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A los responsables de comunicación les preocupa cómo la IA puede afectar a la reputación de sus compañías

Evento IA

La Inteligencia Artificial (IA) ha llegado para quedarse y está transformando la manera de trabajar y comunicar de las empresa. Esta es una de las conclusiones a las que se ha llegado en el evento “La Inteligencia Artificial en la comunicación corporativa” organizado por Cícero Comunicación.

Responsables de comunicación de organizaciones sanitarias se han reunido para analizar de la mano de Fernando Gordón, socio director de Cícero Comunicación, Nuria Molina, directora de estrategia y marketing digital de Cícero Comunicación, y Carlos Santana, ingeniero especializado en IA y divulgador científico, cómo la IA está transformando la manera en que las empresas comunican y cómo esto puede afectar a la reputación de una marca.

Esta transformación está ocurriendo a un ritmo vertiginoso. En este sentido, Molina señala que “la inteligencia artificial supone una auténtica revolución. Seguramente, cambiará el mundo tal y como lo conocemos. Vivimos en un ecosistema en el que el cambio es una constante y, sin duda, el mayor riesgo es quedarse atrás. En Cícero ayudamos a nuestros clientes a adaptarse a este proceso de transformación continua para seguir comunicando de la forma más eficaz”.

IA y reputación: una combinación clave en la comunicación corporativa

La IA no es una novedad, pero se ha convertido en la gran protagonista de este año. Cada vez son más las personas que se interesan por esta tecnología y, sin embargo, son todavía pocas las que profundizan en su conocimiento. Para sacarle el máximo partido a la IA es necesario saber qué necesitas y cómo pedirlo para poder aplicarlo en la comunicación corporativa de la empresa.

La Inteligencia Artificial puede ser beneficiosa para la reputación de una marca, siempre y cuando se utilice de manera ética y responsable. Fernando Gordón, Socio Director de Cícero señala que “la IA puede ayudar a gestionar los problemas de reputación. Puede ayudar a la monitorización de la conversación o la personalización de las respuestas”. “Ayudará a los Dircom a evaluar el interés de una información corporativa según el tipo de medio o según la región en la que se vaya a difundir, pudiendo adaptar el contenido más relevante según la audiencia”, añade.

Sin embargo, también puede tener un impacto negativo. Gordón apunta que “la democratización de la IA va a facilitar la creación de noticias falsas que van a afectar a la reputación de las compañías”. “Cualquiera con un conocimiento mínimo – continúa Gordón –  va a poder difundir textos o imágenes impactantes y falsas en redes sociales de forma automática y anónima”. Desde Cícero ya utilizamos herramientas predictivas. Nos permiten detectar una crisis incluso antes de que surja. De esta forma se toman decisiones de forma mucho más rápida y con muchas más información”, concluye.

Por tanto, si el contenido generado con IA es utilizado sin la supervisión adecuada, podría dañar la credibilidad de la marca y la confianza del público en ella. En este sentido, detrás de la IA debe haber un equipo humano capaz de liderar la revolución tecnológica y guiar a la “máquina” para crear nuevas propuestas de valor para las empresas que sean veraces y que beneficien la reputación.

Una oportunidad en las empresas del sector de la salud

La Inteligencia Artificial supone una gran oportunidad para las empresas y muchas ya la están implementando en su día a día. Sin embargo, como cualquier avance tecnológico, la IA no está exenta de pros y contras. Carlos Santana, ingeniero especializado en IA y divulgador científico, ha destacado que “los sistemas de inteligencia artificial en ocasiones funcionan mal. Por ahora, los daños que pueden causar son limitados, pero cuanto más potente sea la tecnología, más daño puede causar”.

Además, el experto afirma que “esta revolución avanza a una velocidad tan vertiginosa que no hemos tenido la oportunidad de considerar si todo lo que nos ofrece es beneficioso”. La IA tiene ventajas, pero también tiene un lado totalmente opuesto. Al igual que con cualquier avance, su uso correcto o incorrecto depende completamente de la persona que lo utilice hoy en día.

Si bien el uso de la IA conlleva riesgos como la desinformación, también implica oportunidades como la creación de contenido personalizado, la automatización del marketing, la generación de ideas creativas o incluso mejores herramientas de análisis.

De acuerdo con Santana, “hay que entender los tiempos de esta tecnología e ir experimentando. Es el momento de tomar conciencia sobre la existencia de la IA y de todas las posibilidades que brinda su uso”. “En este contexto tan cambiante, -señala Santana- el reto estará en tener la capacidad creativa para saber qué pedir y en tener en cuenta que la IA supone una oportunidad no solo para la empresa, sino para toda la humanidad”.

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