El ayuno intermitente es una opción para organizar nuestra dieta y el horario de comidas de cada día. Durante los últimos años, cada vez más personas han implementado este procedimiento en el que se intercalan períodos de alimentación y períodos de ayuno. Es cierto que el ayuno es beneficioso para la salud, sin embargo, las múltiples formas que hay de practicarlo provocan que los efectos no sean los mismos para todos los consumidores. Elegir uno de los métodos de ayuno dependerá del estilo de vida o de las necesidades de cada consumidor, por lo que se recomienda acudir previamente a un profesional de la nutrición para practicar el ayuno de forma responsable.
Beneficios del ayuno
Ayunar tiene consecuencias positivas para el funcionamiento de nuestro organismo en todos los sentidos. Algunas de ellas son las siguientes:
- Ayuda a quemar grasa y a activar el metabolismo
- Mejora nuestra capacidad de atención
- Disminuye el riesgo de enfermedades cardiacas
- Reduce los niveles de ansiedad
- Mejora la sensibilidad a la insulina
- Favorece la longevidad
- Ayuda a regular los mecanismos naturales de hambre y saciedad
Métodos para practicar el ayuno intermitente
Hay diferentes métodos de ayuno intermitente, pero los más comunes son:
- Método 12/12: Es el método ideal para los que se inician en esta práctica, ya que la mayor parte del tiempo de ayuno se puede cubrir durante las horas de sueño. Además y debido a la cantidad de tiempo, ayuda al cuerpo a transformar la grasa en energía.
- Método 16/8: Implica ayunar durante 16 horas al día y limitar la ventana de alimentación a 8 horas. Por ejemplo, se podría comer solo entre las 12 del mediodía y las 8 de la tarde.
- Ayuno un día sí, un día no: También conocido como ayuno día alternado, en el que se come normalmente un día y se reduce la ingesta calórica al día siguiente
- Ayuno 5/2: Este método implica comer de manera normal durante cinco días a la semana y restringir la ingesta calórica a alrededor de 500-600 calorías en los otros dos días.
- Ayuno por periodos prolongados: Aquí se realizan ayunos que pueden extenderse desde 24 horas hasta varios días, con un período de tiempo sin comida más extenso que en otros métodos.
Ante todo, es importante tener en cuenta que algunas personas pueden experimentar efectos secundarios como irritabilidad, fatiga, dificultad para concentrarse o cambios de humor durante el ayuno. Por otro lado, el ayuno intermitente no es adecuado para todos. Personas con ciertas condiciones médicas, como diabetes, trastornos alimentarios, mujeres embarazadas o lactantes pueden necesitar evitar o modificar este enfoque.