TAR-200 de Johnson & Johnson ha logrado la tasa de respuesta completa más alta observada hasta la fecha con un agente único en pacientes con cáncer de vejiga no músculo-invasivo de alto riesgo que no responden al tratamiento estándar con BCG.
Un avance significativo en el tratamiento del cáncer de vejiga
El cáncer de vejiga no músculo-invasivo (CVNMI) representa una de las formas más desafiantes de la enfermedad, especialmente en pacientes que no responden al bacilo de Calmette-Guérin (BCG), el tratamiento intravesical más utilizado desde hace décadas. En este contexto, los resultados de la cohorte 2 del estudio clínico fase 2b SunRISe-1, presentados por Johnson & Johnson en el Congreso de la Asociación Americana de Urología (AUA) 2025, marcan un punto de inflexión.
TAR-200, un sistema de liberación intravesical de gemcitabina, mostró una tasa de respuesta completa del 82,4% entre los 85 pacientes participantes. Más de la mitad de los que alcanzaron dicha respuesta se mantuvieron libres de cáncer durante al menos un año, y muchos durante más de dos años, sin necesidad de reinducción del tratamiento.
TAR-200 cáncer de vejiga no músculo-invasivo: tratamiento eficaz y duradero
TAR-200 es un dispositivo con un diseño innovador que permite administrar de forma sostenida la gemcitabina directamente en la vejiga, mediante un procedimiento breve y bien tolerado por los pacientes. Según los datos presentados, el 86,6% no requirió una cistectomía (extirpación de la vejiga) al cabo de un año, lo que representa un avance crucial para quienes no pueden o no desean someterse a esta cirugía radical.
Además de su eficacia, este dispositivo ha demostrado un perfil de seguridad favorable ya que la mayoría de los efectos secundarios detectados han sido leves.
Un futuro prometedor para los pacientes
“Durante más de 40 años, las opciones para el CVNMI han permanecido prácticamente sin cambios. TAR-200 podría cambiar esto”, afirmó el doctor Christopher Cutie, responsable del Área de Cáncer de Vejiga en Johnson & Johnson Innovative Medicine.
La innovación detrás de TAR-200 no solo apunta a mejorar las tasas de curación, sino también a preservar la calidad de vida de los pacientes. En palabras de la doctora Henar Hevia, “esta opción terapéutica puede adaptarse mejor a la vida de las personas, permitiendo controlar la enfermedad sin comprometer su bienestar”.
Con estos prometedores resultados, TAR-200 para el cáncer de vejiga no músculo-invasivo se posiciona como una opción terapéutica transformadora y una nueva esperanza para quienes buscan alternativas al BCG o a la cirugía radical.
