En la búsqueda constante por mejorar nuestra salud y bienestar, los suplementos vitamínicos han ganado popularidad como una solución rápida para hacer frente a las posibles deficiencias nutricionales en nuestra dieta diaria.

Los suplementos vitamínicos son productos diseñados para proporcionar nutrientes que pueden no ser consumidos en cantidades suficientes a través de la dieta. Estos productos pueden contener vitaminas, minerales, aminoácidos, hierbas u otras sustancias destinadas a complementar la alimentación.

Los suplementos pueden ofrecer beneficios importantes cuando se usan correctamente. Ello implica que no deben convertirse en el reemplazo de una dieta equilibrada. Es fundamental recordar que más no siempre es mejor; tomar cantidades excesivas de ciertas vitaminas y minerales puede ser perjudicial. Por ejemplo, el exceso de vitamina A puede causar toxicidad, y demasiado hierro puede llevar a problemas de salud graves.

Situaciones en las que es beneficioso tomar suplementos vitamínicos

Incluir estos nutrientes en nuestra dieta diaria tiene sentido en varios casos específicos. A continuación, se presentan algunas situaciones en las que podría ser necesario o beneficioso:

  • Deficiencias nutricionales: Cuando una persona tiene una deficiencia comprobada de una vitamina o mineral, diagnosticada por un médico a través de análisis de sangre u otros estudios. Por ejemplo, deficiencias de vitamina D, vitamina B12, hierro, calcio, etc.
  • Dieta inadecuada o restrictiva: Personas que siguen dietas muy restrictivas o que excluyen grupos enteros de alimentos, como los veganos (que pueden necesitar vitamina B12 y hierro) o quienes tienen alergias alimentarias.
  • Condiciones médicas: Hay enfermedades que afectan la absorción de nutrientes, como la enfermedad celíaca, al igual que existen condiciones que aumentan la necesidad de ciertos nutrientes, como la anemia por deficiencia de hierro.
  • Embarazo y lactancia: Las mujeres que se encuentran en este estado tiene mayores necesidades de ciertos nutrientes como el ácido fólico, el hierro y el calcio.
  • Edad avanzada: Personas mayores que pueden tener una menor capacidad para absorber ciertos nutrientes o que tienen una ingesta dietética inadecuada.
  • Niños y adolescentes en crecimiento que requierenaportes nutricionales extra para su adecuado desarrollo físico y cognitivo.
  • Estilo de vida y condiciones específicas: Las personas que practican actividad física intensa que pueden necesitar más vitaminas y minerales.
  • Medicamentos que afectan la absorción: Personas que toman medicamentos que interfieren con la absorción de nutrientes, como los inhibidores de la bomba de protones (que afectan la absorción de vitamina B12) o los diuréticos (que pueden afectar los niveles de potasio y magnesio).
  • Prevención de enfermedades: En algunos casos, los suplementos se utilizan para la prevención de enfermedades. Por ejemplo, el ácido fólico para prevenir defectos del tubo neural en recién nacidos, o la vitamina D para la salud ósea

La toma de suplementos debe ser supervisada por un profesional de la salud. No todos necesitamos suplementos vitamínicos y tomarlos sin motivos específicos puede no aportar beneficios e incluso podría ser perjudicial.