El vértigo es una sensación que a menudo se asocia con los mareos y que puede tener diferentes causas. Las personas que lo padecen de forma reiterada deben consultar a un profesional, pues esto es síntoma de algún problema interno que suele estar relacionado con el oído, el responsable de controlar el equilibrio, o el cerebro.
En este artículo te contamos por qué aparece el vértigo y profundizaremos en las causas de su aparición, así como los consejos para que aprendas a aliviar sus síntomas.
Síntomas comunes de los vértigos
¿Cómo saber si tengo vértigo o mareo? Los síntomas del vértigo atienden a una sensación de movimiento o de giro, no es un simple aturdimiento en el que se siente debilidad y náusea. Se trata de la característica sensación de los objetos y espacios en movimiento.
Los vértigos pueden ser de dos tipos que atienden a diferentes causas:
- El vértigo periférico es causado por un problema en la parte interna del oído y el nervio vestibular.
- El vértigo central tiene su origen en el cerebro, ya sea en su parte posterior o en el tronco encefálico.
Los daños que aparecen en estas zonas se pueden deber a diferentes patologías o enfermedades, entre las que se encuentran los tumores, la enfermedad de Ménière, las lesiones o los accidentes cerebrovasculares.
¿A quién afecta el vértigo con frecuencia?
El vértigo es un problema bastante habitual que se puede sufrir incluso de una forma muy ocasional, de hecho, la Sociedad Española de Otorrinolaringología (SEORL-CCC) asegura que el 80% de la población lo ha padecido alguna vez en la vida.
Conforme los pacientes tienen una edad más avanzada, este se va convirtiendo en un motivo de consulta bastante común en las consultas de atención primaria.
No obstante, aunque incrementa su incidencia en las personas mayores, esto también puede ocurrir en la edad adulta o en la infancia. No hay un paciente tipo al que se limite esta circunstancia debido a la variedad de causas que pueden servir como detonante.
Qué hacer cuando se tiene vértigo
Cuando aparece el vértigo hay algunas pautas que se recomiendan con la intención de aliviar los síntomas, que son las siguientes:
- Tumbarse de inmediato y no tratar de caminar o realizar ninguna actividad.
- Permanecer en un ambiente calmado, sin ruidos fuertes o luces estridentes.
- Guardar precaución si se tiene que caminar, hacerlo muy despacio y con apoyos.
- Evitar los cambios radicales de posición y los movimientos bruscos de la cabeza.
- Volver a las actividades normales paulatinamente cuando desaparecen los síntomas.
Cuando se recupera la normalidad, es indispensable acudir a un profesional médico para que pueda investigar la causa concreta que este problema y ponga en marcha un tratamiento para el vértigo adaptado al paciente.
Los trastornos asociados con el vértigo
Hay diferentes trastornos asociados con el vértigo y será el médico especialista quien podrá diagnosticar con exactitud el origen, por eso es tan importante acudir a una consulta después de sufrir un episodio con estas características. Son los siguientes:
El vértigo periférico
- Traumatismo en la zona del oído
- Vértigo postural benigno
- Laberintitis (irritación del oído interno)
- Neuronitis (inflamación del nervio vestibular)
- Enfermedad de Ménière
- Presión en el nervio vestibular ocasionado por un tumor
El vértigo central
- Esclerosis múltiple
- Enfermedad vascular
- Convulsiones
- Accidente cerebrovascular
- Migraña vestibular
- Tumores