Cuidar la alimentación durante el embarazo es una de las principales recomendaciones a la hora de garantizar un buen desarrollo del embrión. Por ello, se recomienda seguir una alimentación saludable que favorezca la salud tanto de la madre como el bebé. Por lo contrario, una dieta inadecuada puede aumentar el riesgo de parto prematuro, bajo peso en el nacimiento o complicaciones de salud para el bebé.
Entre las recomendaciones más destacadas están la ingesta de fruta en mayor cantidad, la incorporación de verduras y hortalizas en comidas y cenas, la toma de cereales para ayudar a aportar fibra al organismo y la ingesta de alimentos proteicos. También es importante mantener una correcta hidratación, sobre todo a través de agua, teniendo en cuenta que las necesidades hídricas durante el embarazo son mayores.
Alimentos crudos, un grave peligro en el embarazo
Además de seguir una alimentación saludable existen una serie de alimentos “prohibidos” durante el embarazo por las posibles consecuencias negativas en el embrión. También hay una serie de recomendaciones y pautas a la hora de preparar y consumir los alimentos.
Es importante evitar el consumo de alimentos poco cocinados o crudos durante el embarazo. Esto se debe a la presencia de bacterias en este tipo de productos que, durante la preparación y cocción de los mismos, pueden eliminarse. A través de éstas, se produce una intoxicación alimentaria que se agrava durante el embarazo, pudiendo además afectar al embrión.
En este sentido, es importante no comer mariscos crudos, aunque estén refrigerados; no comer carnes poco hechas; cocer bien los huevos hasta que yema y clara estén duras; cocinar bien los mariscos; evitar productos cárnicos crudos curados, etc.
Lácteos no pasteurizados
Los productos lácteos con bajo contenido en grasa son ideales para una alimentación saludable. Por ello, durante el embarazo es recomendable su consumo teniendo en cuenta que deben ser pasteurizados para evitar la transmisión de ciertas enfermedades. En este sentido debes revisar la etiqueta para comprobar que han pasado por este proceso.
Frutas y verduras sin lavar
Si el lavado de frutas y verduras siempre es importante, durante el embarazo se debe hacer con mayor cuidado. Este proceso ayuda a eliminar bacterias dañinas que pueden ser perjudiciales en el embarazo. También es importante cocinar bien los brotes o leguminosas antes de su consumo.
Bebidas alcohólicas y con cafeína
Beber alcohol durante el embarazo está contraindicado porque aumenta el riesgo de aborto espontáneo y de muerte fetal intrauterina. Además, su consumo puede ocasionar síndrome alcohólico fetal, provocando que la cara no se forme correctamente o que el nivel de inteligencia sea inferior.
Por su parte, es importante reducir la ingesta de cafeína durante el embarazo lo máximo posible, evitando un consumo mayor a 200 miligramos (mg) al día. Esto se debe a que no existen estudios concluyentes de los posibles efectos adversos que puede tener la cafeína en el embrión.
Por último, se debe evitar el consumo de té de hierbas porque no se ha investigado sobre las consecuencias que pueden tener ciertas plantas en el feto. Sólo se podrá consumir por recomendación médica previa.
