El ciclo menstrual es un proceso principalmente hormonal que puede verse influido por otros factores externos. Uno de los más influyentes es el clima, por lo que la llegada del verano y las altas temperaturas pueden producir cambios en nuestro ciclo. El calor modifica notablemente la duración y la intensidad de la menstruación y muchas mujeres notan sus efectos durante los meses estivales.
Cambios notables en tu menstruación durante el verano
Existen distintas formas en las que el calor afecta al ciclo menstrual, entre las que destaca la duración del mismo. En torno a esto existen estudios que demuestran que la subida de las temperaturas puede reducir el número de días del ciclo menstrual, debido a que el calor acelera algunos de los procesos metabólicos hormonales en nuestro cuerpo.
Otro de los cambios es la intensidad de sangrado que puede aumentar debido al calor. Esto se produce por una dilatación mayor de los vasos sanguíneos influida por las altas temperaturas lo que repercute directamente en el flujo menstrual de la mujer.
Por último, los síntomas premenstruales también se ven influidos por las altas temperaturas. Esta situación hace que se agraven los dolores abdominales, los cambios de humor y la retención de líquidos. Todos estos factores se deben a que el calor puede afectar al equilibrio hormonal de la mujer, haciendo que cambie la respuesta del cuerpo a las fluctuaciones naturales de los ciclos menstruales.
Remedios para aliviar el dolor menstrual con la llegada del calor
Según los expertos, existen una serie de medidas que pueden ayudar a aliviar el aumento de síntomas menstruales con las altas temperaturas:
- Uno de los principales remedios consiste en mantener una hidratación adecuada que ayude a regular la temperatura corporal y, por tanto, mitigar los efectos del calor sobre el ciclo menstrual. Además, la pérdida de sangre con el calor puede producir cansancio, fatiga e incluso anemia, haciendo imprescindible una buena hidratación para mantenerse bien.
- Por su parte, en los días de ciclo se recomienda controlar el consumo de alcohol, café, té o bebidas carbonatadas porque tienen un efecto negativo.
- Otro remedio es el uso de ropa ligera para mantener una temperatura corporal más equilibrada, evitando que afecte a nuestro ciclo.
- También es importante la dieta en estos días, incorporando alimentos ricos en fibra, futas y verdura fresca, así como reponer sales en su medida para evitar la retención de líquidos y, por tanto, la hinchazón.
- En relación a esto es importante tener en cuenta que los meses de verano, al tener más sol y luz natural, podemos disfrutar de mayor vitamina D. Esto favorece directamente al sistema inmunológico, aumentando nuestro estado de ánimo y nuestra salud en general, ayudando a minimizar los efectos del ciclo.
- El ejercicio también es recomendable siempre y cuando se practique evitando altas temperaturas. Por ello, en los días de ciclo menstrual, es importante realizarlo en lugares climatizados o bien practicar deportes acuáticos.
- Por último, el descanso o practicar técnicas de relajación como pueden ser el yoga o la meditación pueden favorecer la reducción del estrés, que también puede ser un factor influyente en nuestros ciclos menstruales.