La enfermedad renal crónica (ERC) será la quinta causa de muerte en 2040, si continúa la evolución actual de la enfermedad, y, en 2100, el 25% de la población española la padecería, con un millón de españoles en tratamiento (con diálisis) de sus fases más avanzadas, según ha puesto de manifiesto el doctor Alberto Ortiz, jefe del Servicio de Nefrología en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, de Madrid, en el marco de la 7ª edición del foro Avances y Controversias en Nefrología (ACN), organizado por CSL Vifor.
Según ha explicado el doctor Ortiz, los datos de práctica clínica actuales constatan la vinculación de la ERC con un mayor riesgo de mortalidad prematura. Ha agregado que estos pacientes terminan siendo tratados bien con diálisis, o bien precisan un trasplante, soluciones que considera no son aceptables “a largo plazo”, por lo que “urge a empezar a tratar a estos pacientes de forma temprana, cuando aún no tienen ERC”.
“Nos preocupa mejorar el diagnóstico precoz de la enfermedad, queremos intervenir lo antes posible con estos pacientes”, ha coincidido José Portolés, jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Puerta de Hierro, de Madrid, y uno de los coordinadores del foro, que ha añadido: “El diagnóstico temprano es fácil de establecer. Es sencillo identificar a los pacientes que tienen daño renal en fases precoces, con proteinuria o albuminuria, pérdida de proteínas por la orina, y con la estimación del filtrado glomerular. Hasta ahora nos hemos centrado en fases más avanzadas, pero tenemos que actuar antes”.
Para Patricia de Sequera, presidenta de la Sociedad Española de Nefrología (SEN), es fundamental la prevención para atajar la ERC, que ha definido como una “epidemia”. “Es importante abordar a estos pacientes cuando están en una fase muy precoz, incluso cuando aún no tienen albuminuria”, ha explicado, mientras que al hacer referencia a los tratamientos actuales y de futuro, ha destacado: “Aún combinando todos los tratamientos actuales, hoy por hoy tenemos un porcentaje importante de pacientes residuales que sabemos que van a evolucionar mal”.
Nuevos tratamientos en enfermedad renal crónica
En la mesa que presidía el doctor Portolés, bajo el título “ERC en el 2040”, se expuso, además, una relación de los nuevos tratamientos “que han demostrado reducir el riesgo de progresión de la ERC. Muchos de ellos empezaron en el campo de la diabetes y se han extendido a otras indicaciones. El mensaje clave es que en el futuro vamos a disponer de distintas herramientas para un tratamiento personalizado para cada paciente en función de su riesgo individual”.
Durante el foro, Antonio Charrua, director general de CSL Vifor en España, ha querido dejar claro el compromiso de la compañía con la Nefrología y con la ERC en particular, “un compromiso firme”, que ha definido como uno de los pilares de la compañía. “Seguimos apostando por tener un espíritu de búsqueda incansable e innovador y por poder ofrecer soluciones en las fases más tempranas de la enfermedad renal crónica”.