La alimentación es el pilar básico de nuestra salud. Gracias a los alimentos que ingerimos nos mantenemos sanos y respondemos de manera eficiente a nuestras necesidades y a nuestro día a día. En el caso de los niños, la alimentación es un factor determinante ya que no solo propicio un crecimiento y desarrollo adecuado, sino que va a determinar también su calidad de vida en la edad adulta.
¿Qué entendemos por alimentación adecuada?
Una dieta saludable o adecuada es aquella que nos aporta la energía y los nutrientes necesarios acorde a nuestras necesidades específicas. Gracias a la alimentación podemosresponder de manera eficiente y saludable a nuestras necesidades diarias.
Existen cuatro ejes principales en los que se debe sustentar una dieta adecuada:
- Saludable. Toda dieta, especialmente en niños, debe propiciar el consumo de alimentos que aporten nutrientes beneficiosos para la salud. Se ha de limitar, por tanto, el consumo de aquellos alimentos que entrañen riesgos para la salud.
- Equilibrada. La cantidad de alimentos ha de ser adecuada a las necesidades nutricionales. Una ingesta mayor o menor de alimentos propicia la aparición de trastornos como la anemia o la obesidad, respectivamente.
- Variada. En toda dieta se deben ingerir alimentos de todos y cada uno de los grupos de alimentos. Aunque es preciso señalar que existen excepciones en caso de seguimiento de ciertos procesos asistenciales o patologías.
- Suficiente, es decir, acorde a las necesidades de cada persona teniendo en cuenta criterios como la edad, rendimiento, presencia de trastorno o patologías.
Beneficios que aporta una alimentación saludable a los niños
Tal y como especifica la Comunidad de Madrid, existen una serie de ventajas asociadas a una alimentación saludable. En el caso de los niños, los beneficios que se obtienen al seguir una alimentación saludable, variada y equilibrada son:
- Obtención de los nutrientes esenciales.
- Un pilar indispensable en su crecimiento y desarrollo psicomotor garantizando que este se produzca de manera adecuada.
- Prevención de patologías habituales en su edad como procesos catarrales.
- Disminuye el riesgo de desarrollo a futuro de patologías relevantes como las enfermedades cardiovasculares.
- Reforzar su sistema inmune.
- Otra de las ventajas de una alimentación saludables que los niños, desde edades muy tempranas, interiorizan la relevancia de adoptar hábitos de vida saludable.
- La alimentación adecuada también promueve. su aprendizaje.
- Impacto positivo en su rendimiento físico e intelectual.
Consejos básicos para una alimentación adecuada en niños
Debido a los múltiples beneficios asociados a la alimentación es necesario que los más pequeños de la casa interioricen la importancia de seguir una dieta saludable. En este sentido, este hecho puede ser un reto tanto para los padres como personas de su entorno. Así mismo, las principales recomendaciones de los expertos para que los niños sigan una dieta adecuada son:
- Propiciar el interés del menor en probar e incluir en su dieta nuevos alimentos.
- Acompañar la dieta con otros hábitos saludables como el descanso o el ejercicio físico.
- Promover su autonomía en los primeros meses de vida.
- Inculcarles la relevancia de la ingesta de alimentos variados.
- Especial cuidado con las cantidades y que están sean especificas a las necesidades individuales de cada uno de ellos.
- Seguir las recomendaciones de los expertos en relación a la etapa especifica del menor.
- Evitar las distracciones durante las ingestas tales como el uso de videoconsolas o dispositivos electrónicos.
- Acostumbrar a que el niño realice 5 comidas diarias. Estas sería el desayuno, a mediodía, la comida, merienda y cena.
- Especial cuidado también con las bebidas que acompañan a estos alimentos. Preferiblemente agua. Por tanto, se han de evitar otro tipo de bebidas como los refrescos o zumos envasados.
- Otros aspectos clave en la alimentación en los niños es el tiempo que estos dedican a cada una de las ingestas. En este sentido, se recomienda evitar que coman excesivamente rápido y que la ingesta se realice a un ritmo moderado y masticando adecuadamente los alimentos.