La elección de un enjuague bucal a la hora de hacer la compra puede no resultar sencillo, ya que la gran variedad de productos disponibles dificulta la decisión. No solo es complicado por las numerosas opciones que existen, sino que aparecen en escena otros aspectos.
Uno de los más importantes tiene que ver con las necesidades específicas de cada persona (sensibilidad dental, sequedad bucal, prevención de caries, control de la placa bacteriana…). En base a ello, otra cuestión que entra en juego es la información sobre cada tipo de enjuague. En ocasiones, hay una falta de información clara y precisa que nos impide tomar una decisión adecuada. Además, los ingredientes que puede contener cada producto también se convierten en un factor a tener en cuenta, así como su precio.
Estas son algunas razones por las que se torna difícil elegir entre un tipo de enjuague bucal u otro. Pese a ello, es esencial incluir este producto en nuestros hábitos de salud oral.
La importancia del enjuague bucal
Acompañando siempre al cepillado y al uso del hilo dental cuando se requiera, el enjuague desempeña un papel fundamental en la salud bucal. A continuación, se enumeran algunas de las funciones que realiza el enjuague bucal:
–Reducción del riesgo de enfermedades de las encías: Los enjuagues bucales antibacterianos pueden ayudar a reducir el crecimiento de bacterias que causan enfermedades de las encías como la gingivitis y la periodontitis.
–Control de la placa bacteriana: Los enjuagues bucales pueden ayudar a controlar la placa bacteriana, que es una película pegajosa de bacterias que se forma en los dientes y las encías y puede provocar caries, enfermedad de las encías y mal aliento.
–Prevención de la caries dental: Algunos enjuagues bucales contienen flúor, que fortalece el esmalte dental y ayuda a prevenir la formación de caries.
–Alivio del mal aliento: Los enjuagues bucales pueden ayudar a refrescar el aliento al matar las bacterias que causan el mal olor en la boca.
–Alivio de la sensibilidad dental: Algunos enjuagues bucales están diseñados específicamente para ayudar a aliviar la sensibilidad dental, proporcionando alivio a las personas que experimentan molestias al comer o beber alimentos calientes, fríos, dulces o ácidos.
-Ayuda en la cicatrización después de procedimientos dentales: Después de ciertos procedimientos dentales, como la cirugía oral o la extracción de dientes, los enjuagues bucales recetados por el dentista pueden ayudar a prevenir infecciones y promover la cicatrización.
¿Qué debemos hacer para elegir un enjuague bucal apropiado para nosotros?
Teniendo en cuenta que la elección del enjuague adecuado depende de las necesidades personales, algunos de los consejos para ayudarte a tomar la mejor decisión son:
- Consulta a tu dentista: Antes de elegir un enjuague bucal, es recomendable hablar con tu dentista. Ellos pueden recomendarte el tipo de enjuague bucal que se adapte mejor a tu salud oral.
- Identifica tus necesidades: Puede que estés buscando un enjuague bucal para refrescar el aliento, prevenir la caries, controlar la placa bacteriana, combatir la sensibilidad dental, tratar el mal aliento, etc. Por ello, es imprescindible conocer cuáles son tus necesidades para poder elegir el enjuague bucal más adecuado.
- Busca ingredientes activos: Lee la etiqueta del enjuague bucal para identificar los ingredientes activos. Por ejemplo, el flúor es común en los enjuagues bucales que ayudan a prevenir la caries, mientras que la clorhexidina es efectiva para controlar la placa bacteriana.
- Considera tus preferencias de sabor y textura: Algunas personas prefieren enjuagues bucales con sabores suaves, mientras que otras prefieren opciones más refrescantes o mentoladas. También puedes considerar la textura del enjuague bucal, como si prefieres una solución líquida o un enjuague en gel.
- Evita ingredientes potencialmente dañinos: Algunos enjuagues bucales contienen alcohol, que puede causar sequedad bucal y otros problemas. Si prefieres evitar el alcohol, busca enjuagues bucales libres de alcohol.
- Busca enjuagues bucales con sello de aprobación: Se recomiendan aquellos que cuenten con el sello de aprobación de organizaciones dentales reconocidas, como la American Dental Association (ADA) en Estados Unidos o la European Federation of Periodontology (EFP) en Europa. Esto garantiza que el producto ha sido evaluado y cumple con ciertos estándares de calidad y eficacia.