Aunque aún no se sabe mucho sobre la COVID-19, cada día se va descubriendo novedades sobre afecciones posteriores. Así, pese a que la mayoría de las personas que contraen la enfermedad mejoran pasados unos 10-15 días de haber estado enfermas, en algunos casos se continúan experimentando afecciones generadas el virus. Una serie de problemas de salud recurrentes que pueden o en el tiempo. Un fenómeno conocido como COVID persistente.
Pero, ¿qué es la COVID persistente o “Long COVID” y cómo saber si tengo COVID persistente?
Características de la Covid persistente o «Long Covid»
La infección aguda por SARS-CoV-2 se manifiesta con distintos síntomas, siendo habitual que afecte a las vías respiratorias, aunque también es posible que se presente de forma asintomática. Sea como fuere, hay casos en los que las afecciones se mantienen y prolongan en el tiempo, llegando a conocerse como COVID-19 persistente, de larga duración, postagudo o crónico. Un fenómeno sobre el que se está trabajando constantemente para recabar más información e investigar los efectos del COVID a corto y largo plazo, quiénes lo sufren y por qué.
Los síntomas de la COVID suelen finalizar antes de 4 semanas, presentando secuelas en aquellos casos en los que la enfermedad se ha desarrollado en su forma más grave. Unas secuelas que se pueden prolongar más allá de esas 4 semanas y sin que tengan relación con otras enfermedades previas del paciente.
Así, la COVID persistente se define como un síndrome en el que los síntomas de la COVID-19 persisten semanas o meses después de la infección inicial o la reaparición de síntoma tras meses sin padecerlos. Según las investigaciones, la aparición de la COVID persistente no muestra una relación directa con la gravedad inicial de la infección, diagnosticándose tanto en pacientes leves como graves.
Además, la COVID persistente afecta a personas de cualquier edad, aunque parece ser más habitual en mujeres, un 79%, y en edades medias. Su impacto sobre la calidad de vida de las personas afectadas es elevado, siendo la proporción de 1 a 5 personas síntomas tras 5 semanas de infección, y 1 de cada 10 tras 12 semanas.
¿Cuáles son los síntomas de la Covid persistente?
Los síntomas asociados a la COVID persistente o long covid son muy variados, siendo los más habituales:
- Cansancio
- Dolor muscular y articular
- Mareos
- Fiebre
- Trastornos del sueño
- Problemas respiratorios
- Tos
- Problemas digestivos: dolor de estómago
- Diarrea
- Pérdida del apetito
- Problemas dermatológicos
- Pérdida de cabello
- Dolor de cabeza
- Dificultad para concentrarse
- Pérdida de gusto y olfato
- Pitidos en los oídos
- Palpitaciones
- Conjuntivitis
- Fallos de memoria
Una serie de síntomas que pueden cambiar a lo largo del tiempo, empeorar con el esfuerzo físico o verse limitado para moverse o realizar las actividades diarias. Por ello, si estás planteando hacer ejercicio tras superar el Covid, es fundamental que consultes con tu médico y guardes reposo antes de retomarlo.
¿Qué hacer si tengo Covid persistente?
En caso de presentar alguno de estos síntomas de forma prolongada tras diagnosticarse COVID o si se sospecha que en algún momento se ha pasado a enfermedad, los especialistas recomiendan acudir a la consulta de nuestro médico de Atención Primaria.
Además, es importante mantener las medidas aconsejadas por los inmunólogos y epidemiólogos: ventilación, uso de mascarillas en entornos cerrado y en entorno abiertos en los que no sea posible mantener la distancia social, reducción de contactos sociales, evitar acudir a eventos sociales multitudinarios, higiene de manos y desinfección de superficies.
Para sobrellevar el estrés que genera esta enfermedad se recomienda descansar, hacer ayuno de noticias sobre el COVID-19, cuidarse, dormir bien, hacer comidas saludables y relajarse.